Si por algo se caracteriza la firma coreana
Samsung es por no tener miedo alguno a hacer cosas nuevas. Ni siquiera cuando se equivoca. Y aunque es pronto para decirlo, ese podría ser el caso de
su nueva tableta, un dispositivo de grandes dimensiones: más de 2,5 kg. de peso y una gran pantalla de 18,4 pulgadas.
Su nombre es Galaxy View y está pensada especialmente para un uso doméstico, tanto para contenidos de ocio (juegos, tv, vídeos, música), como profesionales (lleva Office integrado de serie). Sus dimensiones (451,8 x 275,8 x 11,9 mm.) no dejan a nadie indiferente. Ni tampoco el armazón que la firma ha incorporado en la parte trasera y cuya función es poder colocar la tableta sobre cualquier superficie y en varias posiciones, tanto en vertical (para ver vídeos o juegos) como ligeramente elevado sobre una mesa (para escribir con comodidad). En su parte superior, ese mismo soporte incluye un agujero, a modo de asa, para poder introducir la mano y transportarlo de un lugar a otro. No en vano, Samsung se vanagloria de que se trata de la tableta Android con mayor pantalla del mercado.
La pantalla es Full HD a 1080p y en la parte trasera se encuentran dos altavoces estéreos de buen tamaño, capaces de reproducir un sonido sorprendentemente bueno para un dispositivo de esas características. Labatería, de 5.700 mAh, garantiza, según el fabricante, ocho horas continuadas de reproducción de vídeo «streaming». El procesador, del cual no se especifica la marca, es de ocho núcleos a 1,6 GhZ y se apoya en unamemoria RAM de 2 GB. La memoria interna es de 32 GB, ampliable hasta 128 GB con tarjetas micro SD.
Para facilitar su uso como reproductor multimedia, Samsung ha implementado una pantalla especial en la que, de un solo vistazo y a modo de mosaico, aparecen los principales proveedores de contenido audiovisual. Así, sin necesidad de buscar, se podrá acceder directamente a cualquiera de los 16 recuadros de la pantalla. Samsung asegura que próximamente se incorporarán muchos más proveedores.
El nuevo Galaxy View se puede utilizar para redactar correos, textos o para cualquier aplicación profesional. Y aunque no es ese su principal cometido, cuenta con todas las prestaciones de las demás tabletas de Samsung, incluida la posibilidad de trabajar con la pantalla partida.
Pero el principal objetivo de esta enorme tableta es hacer de «segunda televisión» para el hogar. La idea es que podemos llevarlo a la habitación que necesitemos, desde el salón al dormitorio o la cocina, para visualizar cualquier contenido en cualquier lugar de la casa. Y es ahí donde está la clave: resulta difícil cómo encajar Galaxy View.
En muchos hogares, en efecto, ya hay más de un televisor. Y las encuestas indican, además, que muchos espectadores ven la televisión al mismo tiempo que hacen alguna otra cosa. Y sin tener que moverse del sofá. ¿Qué sentido tiene entonces incorporar también el nuevo juguete de Samsung? A la hora de trabajar, la mayoría de los usuarios se sientan frente a su ordenador o usan, si la tarea es más sencilla, las aplicaciones de correo o Word desde el salón o cualquier otra estancia de la casa.
La ventaja, por supuesto, está en el tamaño. Pero ese tamaño (ni la calidad de imagen que ofrece) no supera al de un televisor de 50 o más pulgadas (que es el estándar actual), y para el resto de las funciones la tableta convencional resulta más que suficiente.
En definitiva, la nueva Galaxy View, que se vende en España a partir de este martes a un precio de 649 euros, podría calificarse como un experimento cuyos resultados comerciales, por ahora, se desconocen. Aunque, eso sí, supone una apuesta valiente por parte de la compañía coreana y una búsqueda (a veces angustiosa) de nuevos nichos de mercado.
